Se derrumbó una vivienda ubicada en Aristóbulo del Valle y San Juan: murieron dos personas

Se confirmó que tres personas fueron rescatadas poco después del derrumbe cerca de las 14: una murió y las otras dos fueron trasladadas al Policlínico Regional donde ahora permanecen internadas.

Pasadas las 18, los socorristas encontraron sin vida a la cuarta persona que estaba en la casa. Se trataría de un joven de unos 20 años. El dato todavía no ha sido oficializado.

Una de las dos víctimas fatales vivía sola en la parte superior de la casa y tenía 89 años, según confirmó su hijo a los medios de comunicación, Oscar Gitto.

Video: Urbana FM- Dario Alaniz.

El hecho no tiene precedentes en San Luis y desplegó un operativo que abarca a todos los organismos de rescate de la capital y localidades vecinas.

Según las cámaras termométricas debajo de los escombros habría al menos una persona más, por eso trabajaron dos canes especializados. También hay máquinas que están removiendo los restos de la propiedad que cedió en su totalidad.

De manera manual los bomberos quitan los escombros en las zonas donde podrían estar los otros dos habitantes de la casa ubicada en Aristóbulo del Valle y San Juan.

No se conoce cómo se produjo el derrumbe, pero se cree que pudo ser por una explosión.

La vivienda tenía dos plantas. Abajo vivían otras personas que alquilaban. Posiblemente estaban trabajando cuando ocurrió el desastre. En algún momento funcionó allí un pelotero, y mucho antes también una panadería y un taller mecánico.

Gitto contó los inquilinos estaban realizando un contrapiso, revocando y otras tareas de remodelación. "Estaban haciendo cosas lindas a la casa. No puedo creer cómo voló todo", dijo cuando fue consultado.

También se sabe que una joven pudo salir casi sin lesiones porque cuando sucedió el derrumbe ella se encontraba en el baño.

El Chorrillero visitó ese lugar el 17 de julio del año pasado cuando el dueño de la propiedad, Oscar Gitto denunció un nuevo hecho delictivo. En ese momento expuso la inseguridad que se vivía en la zona y que por las noches entraban a la planta baja (que estaba deshabitada) extraños a dormir y a sustraer elementos. El hombre contó que por esos días quería poner esa esquina en refacción para alquilarlo al sector comercial.